La Comunicación es revalorada en tiempos de COVID-19
Los especialistas de la Comunicación siempre hemos reconocido el valor y la importancia de una buena gestión comunicacional interna y externa en las organizaciones. Uno de los momentos en los que más se «aprecia» al área de Comunicaciones de las empresas es cuando se vaticina o se vive una crisis, ya que en estas situaciones nos preguntamos ¿qué le debo decir a mis trabajadores, clientes, comunidad? Pues hoy vivimos permanentemente en un estado de alerta de crisis.
Cuando preguntamos a nuestros clientes qué es lo que más les preocupa, actualmente la gran mayoría sigue respondiendo: que nuestros colaboradores se infecten masivamente con la COVID-19, que tengamos que paralizar las operaciones por alguna medida preventiva dictaminada por el Gobierno en este contexto… Pues estas preocupaciones tienen un alto nivel de probabilidad de ocurrencia, por eso, debemos recordar que todos los días hay un espacio en nuestras agendas para vivir esta posible crisis.
Después de vivir más de un año en estado de emergencia sanitaria, debemos reconocer la importancia de estar preparados ante cualquier situación de riesgo que pueda impactar a nuestras organizaciones. Si no gestionamos una comunicación estratégica ―mensajes claves a públicos definidos― todo este esfuerzo e inversión invertidos para construir nuestra marca serán perdidos. Cuando enfrentemos una crisis, recordemos que las personas valoran cómo reaccionó la empresa en el momento; si no se responde adecuadamente podemos destruir una reputación lograda en décadas de trabajo.
Los profesionales de la comunicación también hemos identificado una especial revaloración a la Comunicación Interna, las gerencias han descubierto el gran poder que tiene esta área para poder contrarrestar los efectos adversos de la pandemia en sus organizaciones. Con estrategias y enfoques apropiados se puede lograr cambios importantes de comportamiento, reducción de contagios dentro de la empresa, mejora en el trato a los clientes, entre otros; todos estos son indicadores cuantificables que evidencian la retribución de las inversiones hechas.
La comunicación acompaña las acciones de las áreas operativas y legales de las empresas, por eso debe ser apreciada como un aliado estratégico para lograr el impacto esperado. Pero en este punto se debe reconocer que la comunicación no crea mensajes del vacío, no inventa. La empresa debe hacer lo correcto, actuar con integridad y empatía; los comunicadores nos encargamos de incrementar el alcance y el valor de esas acciones. En tiempos de COVID-19, la Comunicación es revalorada.